Dios escucha las oraciones.
*Dios escucha la intercesión de Jesús mezclada con nuestras oraciones* Cristo se ha comprometido a ser nuestro sustituto y seguridad, y no rechaza a nadie. Hay un fondo inagotable de obediencia perfecta que surge de su obediencia. En el cielo sus méritos, abnegación y sacrificio propio, se atesoran como incienso que se ofrece juntamente con las oraciones de su pueblo. Cuando las sinceras y humildes oraciones de los pecadores ascienden al trono de Dios, Cristo mezcla con ellas los méritos de su propia vida de perfecta obediencia. *Nuestras oraciones resultan fragantes gracias a este incienso* Cristo se ha comprometido a interceder en nuestro favor, y el Padre siempre oye al Hijo.—Hijos e Hijas de Dios, 24. El Señor respondes siempre aunque no nos demos cuenta Si nos allegamos a Dios sintiéndonos desamparados y necesitados, como realmente somos, y con fe humilde y confiada presentamos nuestras necesidades a Aquel cuyo conocimiento es infinito y que ve toda la creación y todo l...